¿POR QUÉ ELEGIR UNA CÁMARA RÉFLEX PARA EMPEZAR EN EL MUNDO DE LA FOTOGRAFÍA?

Hoy en día las redes sociales nos hacen consumir fotografía a todas horas. Nos inspiran, nos alientan a tomar nuevas y mejores fotografías y, en muchos casos, nos hacen querer hacernos con material que nos pueda ayudar a ello. Muchos se “conforman” con la cámara del teléfono móvil que, siendo sinceros, es una herramienta utilísima en los tiempos que corren ya que existen dispositivos móviles con cámaras de altísima calidad, con más de una lente, con diversos modos de fotografía y efectos y que consiguen una resolución que nada tiene que envidiar a algunas cámaras.

Sin embargo, los que aman la fotografía de verdad, necesitan tener en sus manos la cámara, el elemento fundamental y sobre el que se basa este tema. Pero aquí nos encontramos con un obstáculo:  cuando nunca has tenido cámaras y no has entrado todavía en este mundo, es fácil sentirse perdido ante las múltiples opciones que podemos encontrar en el mercado. Marcas, modelos, gamas, funcionalidades, precios...

En este artículo, no vamos a recomendar marcas o modelo, sino que vamos a darte las claves para que seas capaz de elegir por ti mismo/a la cámara ideal para tus necesidades. Aunque es verdad  que el fotógrafo no es bueno por la cámara que sostenga en sus manos, si es cierto, que con una buena máquina habrá mas oportunidades de sacar buenas fotos. Las reflex son más pesadas y voluminosas que las mirrorless pero juegan un papel fundamental en la fotografía.

Cámara réflex: elementos clave.

• Visor: No hay mejor modo para clavar la composición de una foto que poder estar viendo de modo exacto lo que vamos a fotografiar. Y para verlo, no hay nada mejor que el visor de una cámara reflex. Mirar por una pantalla en una cámara sin visor es incómodo, existen reflejos, ralladuras en la superficie de la misma, suciedad y no hay resolución igual a la del ojo humano. En un visor podemos ver lo que tenemos que capturar, en una pantalla, la mayoría de las veces, lo intuimos.

• Ergonomía: Las cámaras reflex están dotadas de un agarre muy cuidado y cómodo. A la hora de posicionar nuestro ojo en el visor con las manos sujetando nuestra cámara, es indudable que la comodidad que nos brinda la reflex no nos la brinda una cámara compacta. 

• Latencia: El proceso de fotografíar es una secuencia de tres pasos: encuandre, enfoque y disparo. Siendo el encuadre conseguido con la mezcla de visor y ergonomía. El enfoque automático lo conseguimos combinando el cuerpo de la cámara y el objetivo. Pero sin embargo la velocidad de disparo es el propio cuerpo de la cámara quien nos la ofrece. La velocidad que obtenemos con la reflex no es comparable a la de una compacta.

• Enfoque: El hecho de poder ver en ese preciso instante lo que estás haciendo y poder regular el enfoque de modo perfecto, hace que nunca más tengamos que preocuparnos por las fotos desenfocadas.

Diferencias entre la cámara réflex y otras cámaras.

Empezaremos hablando de las cámaras compactas. Estas son las más pequeñas que hay en el mercado, disponen de un objetivo integrado que no se puede intercambiar y dan la peor calidad. No suelen tener la opción de controlar la exposición de manera manual, por lo que siempre tendremos que utilizarlas en automático. Aunque su ventaja podría ser la manejabilidad, a día de hoy con los teléfonos móviles que existen, este tipo de cámara se nos queda corta.

Las cámaras CSC (Compact System Camera), son el tipo de cámara más reciente y suponen una hibridación entre compacta y réflex, ya que su cuerpo es pequeño y no lleva espejo ni pentaprisma, pero si permite intercambiar los objetivos. La calidad de imagen es muy buena, aunque sigue sin ser equiparable a la de las cámaras réflex. Otros inconvenientes son que la velocidad de enfoque es más lenta y que la ergonomía no acaba de dar con el mejor agarre para una cámara de este tamaño. Además, son 100% electrónicas, lo que hace que consuman mucha más batería.

Por último si hablamos de las réflex, es conocido por todos la gran calidad de imagen que nos brinda gracias a sus sensores incorporados. Permiten intercambiar multitud de objetivos y además nos deja disparar en formato RAW, algo muy importante para aquellos que trabajan en la fotografía y que nos da mejores opciones a la hora de la edición.

Como destacábamos antes, la ergonomía es uno de sus puntos más fuertes y los botones están colocados del modo perfecto para acceder a ellos con nuestros dedos mientras calibramos los parámetros. Además es el tipo de cámara con mayor gama de accesorios y objetivos.